La Odisea, el clásico atribuido a Homero en el siglo VIII a.C., se encuentra entre los textos más importantes e influyentes de la literatura universal. En más de 12.000 versos, repartidos en 24 libros o cantos, se narra el viaje de regreso de Odiseo a Ítaca tras su participación en la Guerra de Troya. Carmen Estrada adapta una cuidada traducción en prosa: La Odisea Ilustrada, editada por Malpaso, donde se acompaña de las espectaculares imágenes creadas por Miguel Brieva (Sevilla, 1974). Ilustraciones realistas expuestas secuencialmente y de manera paralela a la narración, como si de un cómic se tratara, para recrear el apoteósico viaje de Odiseo.
Malpaso 2019 - ISBN 9788417893927 - 26,60 € |
Hay que considerar que la narración proviene de una tradición oral transmitida muy probablemente por las madres a la luz de la hoguera y que llegara a ser representada en los teatros griegos. Homero puede haber sido un simple compilador de historias ancestrales. Carmen Estrada nos facilita resumiendo historias de personajes secundarios y centrarse en mostrar íntegras y ordenadas las acciones principales del clásico.
Miguel Brieva nos comenta cómo nació este ambicioso proyecto: “Carmen Estrada, que es mi madre, quería hacer una traducción, dirigida a la gente joven, de los episodios más conocidos de La Odisea. Una adaptación fiel que mantuviera el tono épico. Y todos coincidimos en que merecía la pena ilustrar el libro entero. Sobre todo porque creo que es la primera vez que se hace. Se han ilustrado muchos pasajes pero nunca todo el texto. Es la primera versión completa ilustrada de La Odisea, en todo el mundo”.
¿Escribió una mujer La Odisea?
“Es muy interesante hacer una lectura, desde un punto de vista más actual, destacando el papel de la mujer. Siempre hemos creído que ocupan un segundo plano en la historia, pero eso es un error, porque las mujeres son claves en el regreso de Odiseo a Ítaca. Sin ellas no lo habría logrado”.
“Eso concuerda -añade- con una teoría de un filólogo inglés del Siglo XIX, Samuel Butler, que llegó incluso a sugerir que el libro podría haber sido escrito por una mujer, basándose en una serie de detalles sobre los personajes femeninos que llaman mucho la atención. El libro también me ha hecho reflexionar sobre el propio Odiseo como héroe y aventurero pero, a la vez, como contador de historias. Y hasta qué punto, con el orden que le ha dado mi madre al libro, las aventuras más fantásticas de La Odisea, en las que aparecen esos seres imaginarios y que están narradas en primera persona por Odiseo, pueden haber sido inventadas por el héroe. Una dualidad de Odiseo como guerrero y como narrador, como poeta en sí mismo”.
Ilustraciones para una "novela gráfica”
“Nuestra idea era que las imágenes fueran potenciando el texto y también lo más fieles posibles al periodo histórico en el que se supone que transcurre la acción, que es el periodo de Micenas, el de la Grecia Arcaica; y no de la Grecia Clásica, con el que se suele confundir”.
“También queríamos que las ilustraciones fueran realistas y darles cierta crudeza y costumbrismo. No idealizarlas con el esteticismo neoclásico, sino darles el realismo de las gentes que habitaron el Mediterráneo 1200 años antes de Cristo, que es cuando acontece la Guerra de Troya”.
Uno de los apartados más trabajados ha sido el de la documentación. “He usado un poco de todo -confiesa Brieva- comenzando por los vestigios arquitectónicos y escultóricos que se conservan de la época. Luego las representaciones que se han hecho a posteriori pero que me parecían coherentes con la época. Y cierta influencia de cineastas como Pier Paolo Passolini o Michael Cacoyannis que han hecho adaptaciones de clásicos griegos desde ese cariz más crudo, más primitivo, alejándose del cine de Hollywood y del Peplum, que tiende a ser una cosa irreal en la que todo está nuevo, todo es perfecto y que es un proyección de nuestro propio presente en el pasado”.
“Lo que más he disfrutado es que, en lugar de hacer ilustraciones a página completa, como pensamos en un primer momento, he hecho como una especie de cómic. Porque el libro está tan lleno de situaciones, detalles, personajes… que al final he optado por darle cierta narrativa gráfica, como en el cómic, aunque no haya textos ni bocadillos”.
“Es lo que más me ha seducido, cómo tratar de narrar varias situaciones a la vez en una sola imagen. Casi podías leer el libro, en paralelo, a través de las imágenes. A mí me gusta especialmente una, que es cuando Odiseo llega a Ítaca y se presenta a Atenea, primero con la forma de un pastor y luego desvelándose como la diosa que es y lo amonesta con cariño. Esa relación entre Atenea y Odiseo también da para mucho”.
Las ilustraciones narrativas son en sepia y las que van a página completa en color. “Yo suelo trabajar en color –asegura Brieva-. Pero como es un relato tan antiguo, le hemos querido dar una estética como apergaminada. Me parecía que la mayoría de las imágenes podían funcionar bien en ese tono como sepia. Mientras que las ilustraciones a toda página son las visualmente más potentes y me parecía que darle color las resaltaba más. Son los grandes hitos de la historia como el cíclope, las sirenas, el reencuentro con Telémaco…”.
El tiempo en la evolución de Odiseo
Odiseo pasa diez años en la guerra de Troya y su viaje de regreso dura otra década. Brieva ha reflejado esa evolución del personaje en sus ilustraciones: “Hay un proceso de envejecimiento que he tratado de reflejar. Eso ha sido fácil porque he ido haciendo las ilustraciones cronológicamente; pero nos hemos encontrado con una dificultad que no habíamos previsto, y es que, en la segunda parte del libro, cuando llega a Ítaca y planea la reconquista de su palacio con Atenea. Ella lo transforma en un anciano. Y luego no se vuelve a comentar cómo el personaje recupera su juventud”.
“Carmen ha hecho una traducción bastante fiel del texto y, sobre todo, ha ordenado la cronología de la historia, que es bastante caótico, de forma cronológica. Por eso el libro comienza con las aventuras más conocidas de Odiseo: Polifemo, las sirenas, circe… Es una versión que facilita mucho el acercamiento al lector actual, pero manteniendo el tono y con una traducción rigurosa del texto”.
¿Escribió una mujer La Odisea?
“Es muy interesante hacer una lectura, desde un punto de vista más actual, destacando el papel de la mujer. Siempre hemos creído que ocupan un segundo plano en la historia, pero eso es un error, porque las mujeres son claves en el regreso de Odiseo a Ítaca. Sin ellas no lo habría logrado”.
“Eso concuerda -añade- con una teoría de un filólogo inglés del Siglo XIX, Samuel Butler, que llegó incluso a sugerir que el libro podría haber sido escrito por una mujer, basándose en una serie de detalles sobre los personajes femeninos que llaman mucho la atención. El libro también me ha hecho reflexionar sobre el propio Odiseo como héroe y aventurero pero, a la vez, como contador de historias. Y hasta qué punto, con el orden que le ha dado mi madre al libro, las aventuras más fantásticas de La Odisea, en las que aparecen esos seres imaginarios y que están narradas en primera persona por Odiseo, pueden haber sido inventadas por el héroe. Una dualidad de Odiseo como guerrero y como narrador, como poeta en sí mismo”.
Ilustraciones para una "novela gráfica”
“Nuestra idea era que las imágenes fueran potenciando el texto y también lo más fieles posibles al periodo histórico en el que se supone que transcurre la acción, que es el periodo de Micenas, el de la Grecia Arcaica; y no de la Grecia Clásica, con el que se suele confundir”.
“También queríamos que las ilustraciones fueran realistas y darles cierta crudeza y costumbrismo. No idealizarlas con el esteticismo neoclásico, sino darles el realismo de las gentes que habitaron el Mediterráneo 1200 años antes de Cristo, que es cuando acontece la Guerra de Troya”.
Uno de los apartados más trabajados ha sido el de la documentación. “He usado un poco de todo -confiesa Brieva- comenzando por los vestigios arquitectónicos y escultóricos que se conservan de la época. Luego las representaciones que se han hecho a posteriori pero que me parecían coherentes con la época. Y cierta influencia de cineastas como Pier Paolo Passolini o Michael Cacoyannis que han hecho adaptaciones de clásicos griegos desde ese cariz más crudo, más primitivo, alejándose del cine de Hollywood y del Peplum, que tiende a ser una cosa irreal en la que todo está nuevo, todo es perfecto y que es un proyección de nuestro propio presente en el pasado”.
“Lo que más he disfrutado es que, en lugar de hacer ilustraciones a página completa, como pensamos en un primer momento, he hecho como una especie de cómic. Porque el libro está tan lleno de situaciones, detalles, personajes… que al final he optado por darle cierta narrativa gráfica, como en el cómic, aunque no haya textos ni bocadillos”.
Las ilustraciones narrativas son en sepia y las que van a página completa en color. “Yo suelo trabajar en color –asegura Brieva-. Pero como es un relato tan antiguo, le hemos querido dar una estética como apergaminada. Me parecía que la mayoría de las imágenes podían funcionar bien en ese tono como sepia. Mientras que las ilustraciones a toda página son las visualmente más potentes y me parecía que darle color las resaltaba más. Son los grandes hitos de la historia como el cíclope, las sirenas, el reencuentro con Telémaco…”.
El tiempo en la evolución de Odiseo
Odiseo pasa diez años en la guerra de Troya y su viaje de regreso dura otra década. Brieva ha reflejado esa evolución del personaje en sus ilustraciones: “Hay un proceso de envejecimiento que he tratado de reflejar. Eso ha sido fácil porque he ido haciendo las ilustraciones cronológicamente; pero nos hemos encontrado con una dificultad que no habíamos previsto, y es que, en la segunda parte del libro, cuando llega a Ítaca y planea la reconquista de su palacio con Atenea. Ella lo transforma en un anciano. Y luego no se vuelve a comentar cómo el personaje recupera su juventud”.
“Ahí sí que he reflejado cómo ese anciano va rejuveneciendo solo, para recuperar el vigor. Porque al final del relato vuelve a ser un poderoso guerrero que masacra a sus enemigos. Esa ha sido la dificultad más grande que me ha llevado a repetir varios dibujos”.
La obra es una fuente ancestral para entender la manera que tenían de ver Mundo en la Antigüedad: El por qué y cómo se rendían los sacrificios a los dioses y el comprender los rituales de libación que se hacían para acompañar y despedir a los fallecidos en su último viaje. Esta edición es muy didáctica y aporta esquemas y cuadros cronológicos de tiempo y lugar para situar la acción de la obra. Este viaje a nuestros orígenes culturales no lo podemos dejar escapar.
Recomendamos la entrada a nuestro blog de otro clásico de la literatura:
No hay comentarios:
Publicar un comentario
GRACIAS POR APASIONARTE CON LOS LIBROS