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| Grijalbo 2002 - 39,60€ |
EL CLUB DEL BANG BANG lo constituye un grupo de jóvenes fotógrafos de prensa que al mismo tiempo fueron amigos y colegas. Ken Oosterbroek, Kevin Carter, Greg Marinovich y Joâo Silva cubrieron informativamente los últimos años del apartheid captando con sus cámaras los violentos tumultos que acontecieron durante los últimos años de la Sudáfrica blanca antes de que Mandela se hiciera con el control de la situación en 1994. Una situación de locura como la que muestra la portada del libro, donde los dos reporteros se disparan mutuamente en medio de un conflicto.
En 1991 Greg Marinovich obtendría el premio Pulitzzer por las instantáneas de linchamiento de un miembro de Inkhata que era acuchillado y quemado vivo.
Kevin Cartner fue galardonado con el premio Pulitzzer en 1994 por la instantánea en la que un buitre acecha con su mirada a una niña moribunda.
Mientras Carter se ausentaba para conceder una entrevista con motivo de este galardón, premonición del nombre del grupo, dos disparos impactaron, uno sobre ken Oosterbroek y, otro, en Greg Marinovich bajo la atenta mirada de la cámara de Joâo Silva. El eterno dilema que cuestiona la ética periodística sobre si el operador debió dejar su trabajo para asistir al herido se decantó hacia el deber de informar.
Tres mese después, Carter, que había desafiado tantas veces su vida en conflictos armados, se quita esta de forma voluntaria. Había sido criticado por no haber auxiliado a la niña acosada por el buitre.
Semejante reproche es translapolable a que tuviera que alimentar a todos aquellos niños que se mostraban ante su objetivo padeciendo hambre cuando la solución al problema no se encuentra en sus manos mientras que su trabajo si ayuda a remediarlo.
Nadie puede reprochar a estos reporteros de primera linea es su valor a la hora de afrontar su trabajo y realizar una crónica de aquellos hechos trascendentales para la Historia. En un linchamiento lo habitual es que te salpique la sangre.
Los cañones esperando el momento para el disparo
Las condiciones hacen que el agua hasta los tobillos (Greg Marinovic) y el fuego supere la cintura con la única protección del cuerpo de la cámara (Kevin Carter)
El libro nos relata en primera persona la aventura de estos reporteros en la memoria de los dos únicos supervivientes de aquella terrible barbarie. Greg Marinovic, quien también obtendría el Pulitzzer por la cobertura del asesinato de Lindsaye Tshabalala, Joâo Silva (a la derecha de la imagen) fue ganador del World Press y reportero de guerra en Iraq.
Recomendamos visitar el post pinchando:
Película en inglés sobre los hechos del libro
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